Hoy, jueves 14 de noviembre, en Corea del Sur se está realizando el Test de Aptitud Escolar Universitaria (대학수학능력시험, abreviado como 수능).
El examen comenzó a las 8:40 am, y más de medio millón de estudiantes se presentaron.
Se trata de un examen que dura ocho horas, y no solo determina si los estudiantes podrán ir a la universidad, sino que también afecta la oferta de trabajo, el salario, dónde vivirán y sus futuras relaciones.
En Seúl, los negocios y bancos cierran, e inclusive la bolsa de valores abre tarde. Muchas construcciones paran, los aviones se mantienen en tierra y el entrenamiento militar cesa. Las motocicletas de policía también participan y llevan a los estudiantes a la locación del examen de ser necesario.
Muchos padres y madres van a los templos budistas o iglesias cristianas, rezando por que sus hijos e hijas pasen.
En la entrada al examen, los inspectores confiscan cualquier tipo de distracción, como relojes digitales, teléfonos, libros, etc. Ni siquiera los profesores pueden utilizar zapatos que hagan ruido, para no distraer a los estudiantes.
Oficialmente, la calificación individual de cada estudiante es publicada en el sitio web un mes después del examen. Pero otros sitios web ilegales permiten comparar su resultado total con el mínimo requerido para ingresar a la universidad que desean. Los surcoreanos son unas de las poblaciones mayormente educadas del planeta. 1/3 de la población tiene una licenciatura.
Sin embargo, el nivel de desempleo en jóvenes se encuentra en su punto más alto. Muchos jóvenes, por tanto, no solo buscan ingresar a una buena universidad, sino a una de las tres mejores universidades de Corea. Al conjunto de estas tres universidades se le llama SKY.
El prestigio de ir a una de ellas abre el camino para poder conseguir empleo en uno de los conglomerados conocidos como «chaebol». Algunos de ellas incluyen Hyundai, Samsung, LG, SK y Lotte.
Pero, al final, nada garantiza que puedan conseguir un buen empleo, pues la competencia es altísima.
c. globalvane.