El alcance fue enorme y de una escala nunca vista: durante al menos 14 horas, los cerca de 2.300 millones de usuarios de Facebook, los más de 1.500 de WhatsApp y los 1.000 millones de Instagram experimentaron fallas en el uso del servicio. Los problemas se detectaron el miercols y se resolvieron parcialmente cerca de las 6am del jueves.
Horas después -a las 24 horas desde que se iniciara el problema- anunció que el problema estaba resuelto: «Nuestros sistemas se están recuperando. Lamentamos mucho los inconvenientes y agradecemos su paciencia».
Y ofreció la siguiente explicación:
«Como resultado de un cambio en la configuración en el servidor, mucha gente tuvo problemas para acceder a nuestras aplicaciones y servicios».
La empresa también señaló que ese cambio «desencadenó una serie de problemas en cascada» en todas sus plataformas.
Pero el hecho de que la red social se demorara un día entero en ofrecer cualquier tipo de explicación levantó sospechas.
Es importante tener en cuenta que las fallas afectaron tanto a los usuarios como a las empresas que se anuncian en Facebook e Instagram, que son los verdaderos clientes de la red social.